Mariposas bolivianas

La continua tala de árboles en Bolivia, en especial en la zona de los yungas, está ocasionando que gran parte de la fauna que posee desaparezca paulatinamente y sin control, siendo las frágiles mariposas víctimas de la deforestación.

Este hecho fue dado a conocer por Yuvinca Gareca, entomóloga que lleva cerca de 15 años dedicados al estudio de las mariposas, buena parte de su tiempo a la elaboración de una colección de mariposas para el Museo de Historia Natural Alcide d’Orbigni.

La tala de bosques, el cambio de uso de suelos y los agroquímicos son los grandes enemigos de los coloridos y alados insectos, precisó la bióloga.

“Bolivia se encuentra entre los cinco países con mayores niveles de deforestación a nivel mundial”, dijo la entrevistada y sus datos guardan asidero con un artículo de BBC Mundo que posiciona a Bolivia entre los cinco países con la mayor cantidad de bosques talados en el mundo.

“El progreso de Brasil en la reducción de la deforestación fue opacado por las pérdidas en Indonesia, Malasia, Paraguay, Bolivia, Zambia y Angola, según un estudio que publica la revista Science”, refiere el artículo de BBC Mundo difundido en 2013.

La eco-región de los yungas es una de las más afectadas en Bolivia, dijo Gareca. Nombró citando a los yungas del Parque Amboró y Carrasco como los sitios afectados, donde no solo las mariposas son objeto de un desplazamiento de su territorio, sino también los animales silvestres.

“Solo en algunos manchones de bosque de los yungas se pueden encontrar las mariposas más bellas de la naturaleza, producto de haberse afectado su ecosistema con la tala”, dijo la investigadora.

Actualmente, Gareca realiza un trabajo de investigación de mariposas para el museo cochabambino logrando ampliar la colección que posee.

Por su parte, Ricardo Céspedes, director del Museo de Historia Natural Alcide d’Orbigni, informó que el museo cuenta a la fecha con una colección de más de 8 mil piezas de las cuales unas 5.200 corresponden al trabajo de investigación de Yuvinca Gareca sobre mariposas diurnas.

Existe otra cantidad importante de mariposas en el museo, unas 2.200 piezas que corresponden a una donación realizada por un matemático francés, Laurent Schawrtz.

Swartz era un matemático francés aficionado por las mariposas y fue miembro de la Fundación para las Ciencias que apoya al Museo. A su muerte decidió donar su colección a Cochabamba. "Es una colección muy importante y una de las más lindas", comentó Céspedes y agregó que los primeros ejemplares datan de 1970 y poco a poco ha colectado hasta probablemente 1990. En el muestrario -en su mayoría- hay mariposas bolivianas, pero también hay de Colombia y Brasil.

"El impacto de las mariposas y el medio ambiente" es un estudio encomendado a dos investigadores, entre ellos, Yuvinca Gareca, dijo el director del Museo.

La entomóloga explicó que gracias a los estudios realizados se puede comprobar el nivel de intervención sobre los bosques.

Producto de este trabajo aseguró que el hábitat de dominio de estos insectos se está reduciendo, debido a la presencia del hombre en su zona de reserva, los yungas, el cual ha sido alterado con el cambio de uso de suelo. Los cultivos de la hoja de coca son -en parte- los responsables de su desplazamiento.

Este coqueto insecto tampoco sobrevive a los terrenos faltos de agua y también desaparece por el uso de pesticidas. Pero su presencia es tan importante para la naturaleza, porque a través de ella se puede verificar y medir cuán protegido está una determinada área.

El trabajo de las mariposas no solo se ha realizado en Cochabamba, dijo el director del Museo, sino también en otros departamentos como en el Chaco, Santa Cruz, Los Yungas de La Paz y en el Parque Madidi.

Unas cajas cerradas en el segundo piso del museo son parte de una colección de mariposas que recién llegó de Santa Cruz y que posteriormente se codificarán, almacenarán e inventariarán como parte del vasto patrimonio destinado a la investigación de las Ciencias Naturales en Cochabamba y el país.