Hijo de presidente de Gambia fue devorado por 4 pitbulls

Habib Barrow, de ocho años, hijo del presidente electo de Gambia, Adama Barrow, murió tras ser atacado por cuatro perros de raza pitbull, cerca de la capital del país, Banyul.

Un portavoz de Barrow confirmó la muerte del hijo del presidente electo en un breve comunicado. El niño falleció a los pocos minutos de arribar al hospital a raíz de las múltiples heridas recibidas en todo el cuerpo.

La población de Gambia cree que al hecho lo rodearon circunstancias oscuras. No creen que se haya tratado de un simple accidente, como se indicó en un primer momento.

Magia

Durante sus 22 años como amo y señor de Gambia, el ex mandatario Yahya Jammeh mantuvo a la población aterrorizada. Incluso les hizo creer que estaba “armado con poderes mágicos”. La mayoría creyó la leyenda y la alimentó. Por estos días, en Banjul, la capital del país, los rumores que se corren son alrededor de la muerte de Habib. Creen que se trató de una venganza y de un acto de “magia negra” por parte del depuesto dictador.

Habib fue enterrado aunque el presidente electo de Gambia no pudo acudir al acto, debido a que se encuentra en Senegal a la espera de jurar su cargo. El gobierno de Senegal anunció que aceptaba que Barrow permanezca en el país hasta que jure su cargo, si bien el actual mandatario, Yahya Jammeh, se ha negado a aceptar los resultados de las elecciones.

El juez del Tribunal Supremo de Gambia Emmanuel Fagbenle ha rechazado pronunciarse sobre el recurso presentado por Jammeh para suspender la toma de posesión de Barrow como nuevo mandatario.

La Comisión Electoral de Gambia declaró el triunfo del candidato opositor en las elecciones celebradas el pasado 1° de diciembre por 227.708 votos (un 43 por ciento) frente a los 208.487 sufragios (un 40 por ciento) conseguidos por Jammeh.

Aunque en un principio reconoció su derrota electoral e incluso se ofreció a ayudar a Barrow con la transición, un día después se retractó y rechazó los resultados oficiales “en su totalidad” porque las pesquisas de su equipo han revelado “errores inaceptables”.

La coalición opositora que se hizo con la victoria en las presidenciales advirtió en diciembre de que Jammeh será tratado como “un líder rebelde” si se niega a entregar el poder.

El triunfo de Barrow generó grandes expectativas dentro y fuera de Gambia. El líder opositor había prometido devolver al país al Tribunal Penal Internacional (TPI) y a la Commonwealth y la Justicia se había aventurado a liberar a varios presos políticos.